Una intervención simple para desarrollar la mentalidad de crecimiento en los docentes
Es importante que los maestros entiendan que la forma en que los estudiantes piensan puede afectar su desempeño y crecimiento académico. La mentalidad de crecimiento, la creencia de que la inteligencia y la capacidad se pueden desarrollar a través del esfuerzo, es esencial para el éxito. Sin embargo, ¿sabía que la mentalidad de un maestro también puede afectar el desempeño de los estudiantes? Un estudio de Heyder, Steinmayr & Cimpian (2023) muestra que la reflexión deliberada sobre la enseñanza puede ayudar a desarrollar una mentalidad de crecimiento en los docentes.
La importancia de una mentalidad de crecimiento
La mentalidad de crecimiento es la creencia de que la capacidad y la inteligencia se pueden desarrollar a través del esfuerzo, las buenas estrategias de aprendizaje, la ayuda y la perseverancia. Los estudiantes con una mentalidad de crecimiento creen que pueden aprender y crecer, incluso si aún no saben todo. Esto contrasta con el pensamiento fijo, en el que los estudiantes creen que su inteligencia y habilidades son fijas e inmutables. Tener una mentalidad de crecimiento puede conducir a un mayor rendimiento, una mejor motivación, menos ansiedad y mejores resultados de aprendizaje.
La importancia de la mente de un maestro
La investigación de Heider y sus colegas se centra en la mentalidad del maestro. Un maestro que cree que las habilidades son fijas e inmutables es menos probable que crea en el potencial de sus alumnos y menos probable que se esfuerce por ayudarlos a avanzar. Por otro lado, un docente con mentalidad de crecimiento creerá en el potencial de sus alumnos y estará dispuesto a invertir en su desarrollo.
Pensamiento útil sobre la enseñanza.
Hader y sus colegas investigaron la efectividad de una intervención simple destinada a inculcar una mentalidad de crecimiento en los maestros. En un ensayo controlado aleatorio, pidieron a 105 aspirantes a maestros que escribieran un breve texto sobre su misión como maestros. Se le pidió al grupo de intervención que pensara en cómo los maestros pueden contribuir al desarrollo de los estudiantes y cómo pueden mantener a los estudiantes motivados para aprender. Además, se les pidió que pensaran en acciones específicas que podrían tomar para desbloquear el potencial de sus estudiantes y estimular una mentalidad de crecimiento.
El grupo de control escribió sobre un tema neutral, a saber, la rutina diaria y las actividades del maestro. El grupo de intervención mostró un mayor aumento en la mentalidad de crecimiento que el grupo de control. Los resultados muestran que el pensamiento deliberado sobre la enseñanza puede aumentar la mentalidad de crecimiento de los profesores.
Importancia para la práctica
La investigación de Heider y sus colegas muestra que la reflexión deliberada sobre la enseñanza puede fomentar una mentalidad de crecimiento y, por lo tanto, ayudar a desarrollar una mentalidad de estudiante. Por tanto, parece razonable incluir este tipo de intervenciones en el sistema educativo y en la práctica educativa.