Los fundamentos psicológicos de la cooperación en materia de reputación
Manrique, H. y col. (2022, 2 de junio).
https://doi.org/10.1098/rstb.2022.0287
abstracto
Las personas valoran una reputación positiva, lo que puede llevarlos a ayudar en escenarios donde los beneficios de retorno no son obvios. Varios modelos de teoría de juegos apoyan la hipótesis de que la preocupación por la reputación puede estabilizar la cooperación más allá de familiares, parejas o grupos pequeños. Sin embargo, estos modelos no proporcionan información explícita sobre los mecanismos psicológicos subyacentes que respaldan la colaboración basada en la reputación. Por tanto, estos modelos no pueden explicar la aparente rareza de la cooperación basada en la reputación en otras especies. Aquí identificamos los mecanismos cognitivos que pueden apoyar la cooperación basada en la reputación en ausencia de lenguaje. Argumentamos que tener una gran memoria de trabajo mejora la capacidad de retrasar la gratificación, comprender los estados mentales de los demás (lo que permite la toma de perspectiva y la atribución de intenciones) y crear y seguir normas que son bloques de construcción clave de una reputación cada vez más compleja. colaboración basada. Revisamos la evidencia existente de estos procesos que ocurren durante la ontogenia humana, así como su presencia en simios no humanos y otros vertebrados. Con base en esta revisión, predecimos que la mayoría de las especies no humanas se limitarán cognitivamente a mostrar formas simples de cooperación basada en la reputación.
discusión
Hemos presentado cuatro bloques de construcción psicológicos básicos que consideramos facilitadores clave de la colaboración compleja basada en la reputación: memoria de trabajo, retraso en la satisfacción, teoría de la mente y normas sociales. La memoria de trabajo permite el procesamiento paralelo de información diferente para evaluar correctamente las acciones de otros y actualizar sus calificaciones de reputación. Retrasar la gratificación es útil para muchos tipos de colaboración, pero puede ser particularmente relevante para la colaboración basada en la reputación, donde las recompensas provienen de una interacción futura con un observador en lugar de una consideración inmediata del socio actual. La teoría de la mente facilita la medición de las acciones de los demás y reduce el riesgo de que la propagación de errores socave la colaboración. Finalmente, las normas apoyan la teoría de la mente al dar a los individuos una medida de lo que está bien y lo que está mal. Cuanto más desarrollado esté cada uno de estos bloques de construcción, más compleja puede volverse la estructura de interacción. Somos conscientes de que al seleccionar estos cuatro mecanismos sociocognitivos estamos dejando de lado otros procesos que pueden estar involucrados, por ejemplo, la memoria a largo plazo, pero pensamos que los mecanismos que hemos elegido son más críticos y permiten una mejor comparación entre especies.