Estrés: ¿cuáles son los síntomas?
¿Te estresas fácilmente?El estrés es definitivamente una reacción fisiológica normal. Pero al mismo tiempo también es algo que podemos «heredar» y llevar con nosotros si experimentamos dramas angustiosos en la infancia. En algunos casos este estado mental no es necesariamente negativo, pero se convierte en el empujón que nos ayuda a reaccionar en muchas situaciones. Los mecanismos que lo activan son los mismos para cada persona, pero cambiará la forma en que respondemos a ellos individualmente.
El estrés y la salud: ¿qué es lo que lo causa?
El estrés está estrechamente relacionado con la ansiedad y causa una serie de reacciones extrañas, y a menudo incontrolables, en nuestro cuerpo. Si se prolonga en el tiempo sin la capacidad de manejarlo, puede tener consecuencias en nuestro estado de salud. Son típicos los dolores de cabeza, los dolores de pecho, los problemas estomacales y el poco descanso, así como el aumento de la presión. Sin olvidar entonces que es responsable del empeoramiento de patologías o síntomas que ya estaban presentes en el individuo. Según varios estudios, para encontrar algo de paz y alivio, algunas personas tienden a refugiarse en el alcohol, el consumo de drogas o el tabaco. Esto crea una adicción para olvidar el estrés.
¿Cuáles son los síntomas más comunes?
Además de la salud, el estrés afecta a nuestras emociones y a nuestro comportamiento habitual. Los síntomas pueden ser diferentes pero generalmente reconocemos dos grupos. El primero es el relacionado con nuestras emociones, mientras que el segundo concierne a la esfera física, para un malestar más tangible.
Emocionalmente, una persona estresada experimenta cambios de humor muy repentinos y vive con el temor de no lograrlo o de tener un colapso repentino. Al mismo tiempo, se pierde la sensación de angustia, de miedo perenne a todo y de autoestima. Esto lleva con el tiempo a una condición de soledad que lleva a una depresión que puede ser peligrosa.
A nivel físico los dolores son muy variados y pueden afectar a varias áreas. Se percibe una pérdida progresiva de energía, de deseo sexual y se vive con una eterna sensación de agotamiento. En el momento del descanso todo se desvanece: el insomnio es un síntoma típico de los que viven bajo un gran estrés. Además de los ya mencionados malestares estomacales, náuseas y dolores de cabeza.
Por último, todos esos dolores que están relacionados con la tensión muscular y el aumento de los latidos del corazón también son típicos.
Existen soluciones para combatir el estrés severo
Sin prometer soluciones milagrosas, es útil decir que para manejar el estrés conscientemente, hay que encontrar una salida. Ya sea que se trate de algún ejercicio al aire libre o de unas vacaciones relajantes para recuperar su biorritmo. La meditación también ayuda al sistema nervioso y permite combatir las alteraciones eliminando el estado de agitación que se siente, que podría causar ataques de pánico.
Acostúmbrate a encontrar un sentido positivo para cada aspecto de la vida, incluso en los momentos más complicados o aburridos. Podrás empezar a trabajar activamente para mantener el nerviosismo a raya.